Joyce Meyer - Aprenda A Respetarse a Si Mismo
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14:35:00
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Creo que mucha gente experimenta una crisis de autorespeto hoy día. Esto debe cambiar.
Si usted siente odio hacia usted mismo, duda de sí mismo, abusa de su cuerpocon una mala alimentación o malos hábitos, o regularmente tiende a ser elúltimo en la lista de personas a quienes les realiza alguna tarea, entoncesusted no comprende el valor que posee.Creo que mucha gente experimenta una crisis de auto respeto hoy en día.
Esoes algo que debe cambiar, de manera que se pueda lograr vivir una vidacristiana eficaz. En otras palabras, me refiero a que debemos hallar unequilibrio que permita que nos involucremos en buenas obras mientras sigamoscon la tendencia de saciar nuestras necesidades básicas.
Como único podemosverdaderamente hacer la obra de Dios de la manera que Él quiere, es cuando semantenemos todo nuestro ser en óptimas condiciones. A través de mucho estudio,oración y experiencias, he llegado a descubrir ciertas claves para disfrutar deuna vida saludable ahora.
Una de las cosas más importantes que he aprendido es el hecho de dejar queDios tome la carga pesada.Jesús dijo: "Venid a mí todos los que estáis trabajados y cansados, yyo os haré descansar" (Mateo 11:28).
No fuimos creados para funcionar sinDios. Con Él, podemos romper las ataduras de la gula, la adicción a las drogas,el cuidado personal pobre y otros problemas contra los que hemos luchado.Algunos no hemos aprendido aún a amar nuestro cuerpo lo suficiente como paracuidarlo adecuadamente. De hecho, enfrentar la verdad es uno de los actos másvalientes que podemos hacer. Simplemente, no podemos lucir estupendos si no nossentimos fabulosos.
La manera como nos sintamos se muestra en algún lugar, yasea en el cuerpo, la mirada triste y hasta en el tono de la piel. Es nuestranaturaleza cuidar de nosotros mismos. Entonces, ¿por qué no lo hacemos? Lleguéa varias conclusiones:
Los medios de comunicación tergiversan la imagen del cuerpo: Somosbombardeados constantemente con ideales de belleza inalcanzables, mientras quela obesidad predomina tanto que casi se ve como algo normal. Necesitamosredescubrir la manera de cómo debe lucir una persona saludable.·
Ignoramos cómo cuidar nuestro cuerpo: Losmalos hábitos alimenticios, la falta de información y la comida chatarra hanconfundido a la gente sobre lo que es una dieta integral y cómo ingerir losalimentos correctos en raciones adecuadas.
Vemos el ejercicio como algo obsoleto: Contamoscon tantos inventos muy convenientes para usar en nuestro diario vivir, quesolemos anular por completo el ejercicio. ¡Ni siquiera queremos caminar! Laverdad es que resulta bueno que ejercitemos el cuerpo.
Estamos estresados: La presión de hacermalabarismos con la carrera profesional junto con la tarea de ser padres hancreado una carga pesada en nuestra vida. La vida es un regalo para disfrutarse.Debe ser agrada ble, no caótica ni descontrolada.
Depende de nosotros el queestablezcamos las prioridades y vivamos con éstas.· Tenemos una perspectiva poco saludable sobre el altruismo: Sesiente muy bien realizar cosas para los demás, pues nos hace sentirimportantes. Sin embargo, suelo ver la gente ignorar sus propias necesidadesbásicas. Todo en la vida debe tener un equilibrio.
Hemos perdido nuestro apoyo: Mantener unabuena red de apoyo es una manera genial de prevenir la formación de malascostumbres. Necesitamos pasar más tiempo con Dios y los demás.
Hemos olvidado lo que valemos:Como mencioné anteriormente, si usted no entiende cuál es la importancia quetiene dentro del gran plan de Dios, el hecho de cuidarse le parecerá inútil.Dios tiene un gran futuro para usted, ¡y usted necesita estar listo para ello!
A medida que usted vaya estableciendo unas metas alcanzables, le insto a quese ría de los contratiempos, haga que éstos obren a su favor y se recompense.Concéntrese en ser responsable de sí mismo. Vele por su bienestar, y, sobretodo, ¡respétese!